Creo que han pasado dos años desde la última vez que hice mi ultimó post. Dos años en los que han pasado (y no pasado) infinidad de cosas. Hice amigos, perdí amigos, me desenamoré de mi carrera universitaria, muchas cajetillas de cigarros, muchas botellas de ron, peleas, chismes, tachas, púas, cuero, películas, fotos, entre otras cosas más y mucha confusión.
Siento que durante este tiempo he aprendido de buenas y malas experiencias, de buenas y malas personas. A pesar de todo eso, y jurarme no volver a escribir, hoy lo hago porque ya perdí muchas cosas durante ese tiempo y, yo siempre me he expresado mejor por escrito que al hablar, entonces, no quiero perder la única cosa en la cual yo siento que soy buena. Obviamente, he perdido algunos viejos trucos, pero no me interesa volver a empezar.
Bueno, no quiero hacer un inventario de las cosas que perdí, pues he venido con las ganas de dejar en claro que ya no quiero "inmortalizar" a nadie en mi blog. Es cierto que abrí este sitio para desahogarme de mis experiencias amorosas, creo que debo empezar a tomarme las cosas más a la ligera en cuanto a los amantes que se cruzan en mi camino. No he tenido una relación amorosa en mucho tiempo, pero nunca he estado sola (if you know what I mean). Siempre salimos con alguien, nos gusta alguien, alguien nos afana, entre otras formas de engañar a la soledad. Pero ya basta de expresarme como si fuera una jodida película americana en la que sabes que al final la rubia bonita se mete tremendo agarre el alto y fornido galán de la película. PAR FAVAR, sabemos que esas cosas no pasan.
Inmortalizar, en el sentido de que no quiero hablar sobre aquella persona que ronda por mi vida en determinado momento, hablar de esa persona como si fuera un maldito ser bello que ha sido amamantado por un unicornio. A eso me refiero.
Actualmente, no quiero echar a nadie, pues lo único que he decidido hasta el momento es cambiar mi forma de expresarme sobre aquellos personajes que aparecen en mi día a día. Más adelante, de manera muy selectiva, puede que me atreva a compartir algunos pasajes de mi turbulenta vida de fin de semana y nerviosa vida de días útiles. Por último, también quisiera decir que aquí hablaré de todo, así es, todo. Todo lo que se me ocurra.
Si alguien me lee, procure no burlarse.
Una canción para no perder la costumbre.
